4 – Probar y perfeccionar
Pruebe su recurso en una situación real, aprenda de esto y luego perfeccionelo.
Pruebe su producto
Recuerde que su producto está diseñado para que lo utilicen personas reales. Ahora es el momento de probarlo en situaciones reales.
Primero pregunte, ¿qué área del recurso necesita ser probada? (¿La teología? ¿El diseño del aprendizaje? ¿El contenido? ¿La función? ¿Otros?) Lo que se necesita probar determinará si es mejor la revisión por pares, las pruebas de campo con un grupo o la retroalimentación de expertos.
Pruebas de campo
Probar su recurso con una muestra de público objetivo le ayudará a perfeccionarlo. Algunas de estas opciones pueden ayudar:
- Es posible que desees probar una sesión de un plan de estudios con un grupo, incluso si se están escribiendo más sesiones.
- Lo ideal sería probarlo con un grupo que no sepa que usted lo está produciendo y que le brinde comentarios confiables y honestos.
- Pruebe con un grupo pequeño de personas.
- Utilice comentarios de encuestas, observaciones o comentarios de los líderes/usuarios de su recurso.
Comentarios de la encuesta
Para obtener comentarios útiles, pregunte lo que necesita saber y ofrezca espacio para pensamientos e ideas que no haya considerado. Establezca un límite de tiempo breve para tener nuevos pensamientos e ideas rápidamente. Una forma de recopilar comentarios es mediante una encuesta.
Una encuesta para participantes/líderes/usuarios
Estructura tus preguntas de retroalimentación para explorar diferentes áreas de utilidad como:
- ¿Qué fue útil/útil?
- ¿Qué funcionó mejor?
- ¿Qué no funcionó tan bien?
- ¿Qué te sorprendió / deleitó / sorprendió?
- ¿Qué está faltando?
- ¿Qué cambiarías para mejorar esto?
Retroalimentación por observación
Otro método de retroalimentación es que su equipo u otra persona observe cómo se recibe el recurso y luego lo escriba. Escribe notas sobre:
- ¿En qué momentos la gente estuvo más comprometida?
- ¿Cuándo perdieron la atención?
- ¿Qué tan bien entendieron las instrucciones/puntos principales/mensaje?
- ¿Qué quieres conservar o cambiar ahora que lo has visto en acción?
- ¿Qué preguntas adicionales tiene para los líderes que probaron su recurso?
Comentarios de expertos
Para áreas como teología, diseño de aprendizaje, contenido médico o especializado: enumere los especialistas a los que el equipo puede pedir ayuda para crear los recursos más útiles y precisos.
Refinación y pulido
Una vez que haya probado su recurso y haya recopilado comentarios, es hora de realizar los últimos cambios y realizar las comprobaciones finales.
Refinamiento y edición final.
Decida en equipo qué comentarios implementará:
- ¿Qué es crítico y debe cambiarse?
- ¿Qué es importante y debería cambiarse?
- ¿Qué podría ser útil cambiar si hay tiempo?
Pulido y control del producto final.
Los controles finales implicarían:
- Una revisión final y revisión de diseño.
- Comprueba que tienes permiso para utilizar imágenes.
- Asegúrese de que todos los enlaces de Internet funcionen y sean correctos.
- Citar la Biblia con precisión, con referencias adecuadas.
- Reconocer todas las fuentes.
- Asegúrese de que la calidad general y el diseño se vean bien.
- Compruebe que su producto final pueda traducirse.
Refinamiento
¡Estás cerca de terminar! ¡Felicidades!
Terminando bien
En muchos FlashLabs, los recursos se comparten ampliamente en sitios web de recursos (como Max7 o En sus marcas, listos, fuera) y a través de redes sociales (como Telegram y WhatsApp). Aquí hay una lista de verificación a considerar:
- Imprima su producto en diferentes formatos (por ejemplo, Word y PDF; o videos, temas de video, temas de audio/SFX; PowerPoint, etc.).
- Reúna los archivos de recursos y comparta la versión final publicada con todo el equipo.
- Cargue su recurso donde sea necesario, facilitando el acceso a los archivos traducibles.
- Si los subes a un sitio como Max7, recuerda también subir archivos para traductores, copias en blanco o versiones sin palabras de videos.